Rafael Vela come filet mignon e incluye propina en viáticos del Estado
En una misión oficial, el fiscal sumó propinas y platos exclusivos a su factura de viáticos, provocando críticas. ¿Cuánto gastó?
El fiscal Rafael Vela, quien se encontraba en una diligencia internacional en el marco de sus funciones, causó controversia al incluir en los viáticos del Estado gastos personales como propinas y alimentos de alto costo.
Durante su viaje en abril de 2022, Vela se benefició de una serie de almuerzos y cenas, que no solo incluyeron platos exclusivos, sino también propinas por servicios en restaurantes de lujo.
El 17 de abril, antes de su vuelo a Sao Paulo desde Lima, Vela optó por un almuerzo en el restaurante La Nacional en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez. El gasto, de 143 soles, incluyó una sopa criolla, tallarines a la huancaína y una Coca-Cola Zero.
Sin embargo, este sería solo el inicio de una serie de gastos que, según las directrices oficiales, deberían limitarse a lo estrictamente necesario para cumplir con la misión.
En Brasil, tras una jornada que lo dejó exhausto, Vela eligió el famoso restaurante de carnes Fogo de Chao en Sao Paulo. Allí, disfrutó de una comida que alcanzó los 300 reales, más de 185 soles, por un plato de brochetas, jugo y un purín.
Además, incluyó una propina de 22 soles en el total de la factura, un gasto que, si bien podría ser cubierto con su dinero personal, fue absorbido como parte de los viáticos del Estado.
La cuenta no se limitó a un solo día. En otro almuerzo, Vela optó por una ensalada César y una Coca-Cola Zero, siguiendo su intento por mantener la línea. Sin embargo, el pedido incluyó también papas fritas y costillas a la barbacoa, con lo cual, el fiscal incrementó el costo del almuerzo a casi el doble de lo estimado inicialmente. La propina también estuvo presente.
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Otros antojos de Rafael Vela
El 21 de abril, Vela continuó con su dieta proteica y eligió un filet mignon, acompañado de arroz piemontés. En esta ocasión, la propina ascendió a 30 reales (aproximadamente 62 soles). Al día siguiente, en su hotel de lujo, el fiscal repitió la carne, aunque esta vez complementó con una sopa y una gaseosa Guaraná.
El uso de los viáticos del Estado para cubrir estos gastos provocó cuestionamientos sobre la ética y la correcta asignación de fondos públicos. Según la normativa, los viáticos están destinados a cubrir alimentación, alojamiento y movilidad durante las comisiones de servicio.
Sin embargo, no se especifica de forma clara si el pago de propinas o gastos en restaurantes exclusivos puede considerarse adecuado dentro de estos parámetros.
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