Denuncian consultorías y contratos irregulares

Por César Rojas

En agosto del año pasado, el directorio de PetroPerú decidió pagar 60,000 dólares a una empresa privada, para saber si convenía vender o solo concesionar plantas de agua, de nitrógeno y de otros materiales que se usan en la refinería de Talara.

“Contratación de servicio jurídico especializado para prestar el servicio de acompañamiento legal para el proceso de venta o cesión de las Unidades Auxiliares del Proyecto Modernización de la Refinería Talara (PMRT)”, es el pomposo título del proceso, que ganó el Estudio Miranda & Amado Asociados.

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“Petroperú tiene técnicos y profesionales capacitados que podían emitir un informe igual sobre este tema, pero el señor Carlos Paredes decidió gastar un montón de dinero en que una consultora, en este caso un estudio de abogados, le diga cómo trabajar”, cuestionó Héctor Farfán, secretario general de la Unión Sindical Oleoducto.

Otro aspecto sospechoso es que Paredes antes había trabajado en Intelfin Estudio & Consultoría, una consultora que daba servicios a Repsol, competidora de la empresa estatal en el rublo de hidrocarburos.

“El año pasado trajo como gran especialista a Claudia Isabel Velarde García, quien solo era bachiller en Economía”, manifestó Amadeo Ato, secretario general del Sindicato de la Refinería de Talara.

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EXPRESO comprobó que la referida funcionaria recién se había graduado en abril del año pasado en la Universidad Pacífico, y venía de laborar en Intelfin.

Farfán y Ato, junto con otros dirigentes como Isaías Gonzales y Kenny Palomino, fueron despedidos de Petroperú luego de hacer este tipo de denuncias. Según la gestión de Paredes, habrían usado mal los viáticos que se les proporcionaba, pero ellos alegan que todo estuvo en regla.

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