Cancelarán paquetes de turismo a Machu Picchu

Por Plinio Esquinarila

El país es consciente de que el turismo ha sido la actividad más afectada por la pandemia porque miles de trabajadores han perdido sus empleos y sus ingresos, esto porque medianas y pequeñas empresas han dejado de operar. Pero resulta que en la actualidad hay un nuevo golpe contra la reactivación del sector: la aprobación, por el pleno del Congreso de la República, por 100 votos a favor y una abstención, de una Nueva Ley del Trabajador Porteador, señala el empresario, magíster en Administración y presidente de la Cámara de Comercio del Cusco, John Gonzales Chuchón.

¿Cómo afecta al turismo la aprobación de la nueva ley del porteador por parte del Congreso de la República?

En turismo los paquetes turísticos no se venden de la noche a la mañana, se venden con semanas o meses de anticipación, incluso se hacen reservas de un año a otro y esto tiene fijado un precio en el que no se consideró lo dispuesto en esta ley, lo que originará la cancelación de reservas o paquetes vendidos debido a que se tendría que incrementar los precios de estos paquetes o, si se continúa con el servicio, estarán condenados a sufrir grandes pérdidas. En resumen, esta ley encarecerá los costos de los servicios turísticos y la ruta del Camino Inca no será competitiva frente a otros lugares que brindan servicios similares, lo que limitará el proceso de reactivación económica del sector.

¿Afecta solamente a los empresarios de turismo o también a otros sectores?

Afecta no solo a la cadena de servicios turísticos sino también a los otros sectores, ya que en Cusco aproximadamente un 70% de la población vive del turismo, directa o indirectamente; los sectores más afectados serían el comercio y los de servicios generales.

¿Cuáles serían las consecuencias de incrementar las remuneraciones de los porteadores en un 250%?

En primer lugar, se frenarían los esfuerzos que se están realizando para reactivar el sector turismo, ya que se tendría que incrementar los costos de paquetes reservados o vendidos, lo que no caería bien a aquellos que adquirieron con anticipación dichos paquetes. Por lo tanto, se generaría una cancelación de dichos servicios. En segundo lugar, los precios de la oferta turística se incrementarían haciéndolos menos competitivos frente a otros destinos. En tercer lugar, las empresas formales podrían dejar de operar generando desempleo y esto agravaría la crisis económica que actualmente estamos viviendo. Este incremento de costos también serviría de motivación para que otros sectores hagan su berrinche y soliciten incrementos salariales desproporcionados amparados en esta ley.

Lea la nota completa en nuestra versión impresa o en nuestra versión digital, AQUÍ.

Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, Twitter e Instagram, y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.