Marita Barreto y Harvey Colchado van contra jueces incómodos
Sospechas en el Ministerio Público con los jueces citados por la fiscal de la Nación.
¿Qué ha pasado con la titular de la Corte Superior de Lima, María Vidal La Rosa Sánchez, y con la jueza del Sexto Juzgado Constitucional, Jacqueline Tarrillo? ¿Han asistido a la citación del pasado viernes con el objetivo oficialista de embarrar la medida cautelar a favor de Patricia Benavides y en contra de las investigaciones preliminares de la Junta Nacional de Justicia (JNJ)?
Hablen. Si por algo debe ser citada la Dra. María Vidal es por no ejecutar cantidad de sentencias que desde años suben y bajan en la 2da. Sala Civil (Sara Echevarría Gaviria, César Solís Macedo y Manuel Miranda Alcántara) y también de la Tercera Sala Contencioso Administrativa presidida por Gustavo Ruiz Torres.
Solidaridad con Patricia
La decisión del Congreso, en el pleno de este viernes, de no dar pase al debate sobre la remoción de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) podría desembocar en lo que hemos advertido hasta el cansancio: Que la nueva Fiscalía de la Nación, obviamente caviarizada, con Marita Barreto y Harvey Colchado como arietes, ya apuntarían a intervenir y detener a los congresistas de oposición, no solamente “Niños”, como Patricia Chirinos, quien ya ha alertado sobre este eventual zarpazo.
Debilidad fatal
Esto es consecuencia de la cobardía del Congreso de no haber hecho respetar sus fueros ante la avasalladora JNJ. Una muestra de debilidad que es fatal en política.
Claro que es culpa de César Acuña y el titular del Congreso, Alejandro Soto, quien impidió, por obvias órdenes de su alto mando, el debate de las mociones de remoción de la Junta de acuerdo a los escritos de Alejandro Muñante y Jorge Montoya, ambos de Renovación Popular.
Pero la culpa no solo es de estos dos. Es de toda la oposición.
Añadiendo a otros...
Si se allana las oficinas y domicilio de la congresista ‘Patty’ Chirinos, a manos de la Diviac de Harvey Colchado, y se detiene “preliminarmente”, a pesar de ser aforada, esto será la mejor muestra de que el Congreso está con los días contados.
Con el añadido que la fiscalía suprema –en manos de los caviares, reiteramos- ha podido tramitar ante el juez Juan Carlos Checkley el pedido pendiente de intervenir a los “Niños”, añadiendo a otros. Esta es la trampa.
En este escenario no sería raro que el fiscal supremo haya decidido abrir investigación a la suspendida Patricia Benavides.
El "operador" de Otárola
“Llora como mujer lo que no supiste defender como hombre”, le había dicho su madre al rey Boabdil, el último monarca islámico en España.
Esto hay que refregarle a quienes permitieron que la caviarada vuelva a pretender copar todo el sistema de justicia. Ahora van por el Congreso, mañana a la Defensoría y al final sobre Dina Boluarte, aunque el proteico Alberto Otárola cree que puede ser el “operador” de todos los escenarios. Ja, ja, ja.
Los sueños del espía
Qué lindo que ha salido, ayer, el cherry-entrevista que le hicieron a Harvey Colchado Huamán, el jefe de la policía política llamada Diviac, que tiene la perspectiva de independizarse de la Policía Nacional para que, a futuro, sea un nuevo cuerpo de los servicios secretos del caviaraje, con el ingrediente de ser, además, un ente operativo. A eso apuntan.
¿Y el cadaver de Alan?
En el diario numérico de la “Chichi” le han hecho creer al espía Harvey que es lo máximo. Él asiente y añade que es apolítico, que solo responde con resultados, y que nunca han existido fallas en sus operativos. Ah, caramba.
¿Y el cadáver acusatorio de Alan García? “Fue un suicidio. Eso ya se investigó”, fue toda su respuesta, sin que haya repregunta de tan reprobable suceso en los años de gloria del largartismo y de los fiscales odebrechistas como José Domingo Pérez.
Se le escaparon...
¿Ha olvidado el citado agente que se escapó el “hermanito” César Hinostroza? ¿Que no pudo dar por una mera puerta con el exministro del MTC Juan Silva Villegas, en Puente Piedra? ¿Que también se le escapó el socio (o sucio) de Pedro Castillo, Alejandro Sánchez, el dueño de la casa de Sarratea? ¿Cuántos se le han escapado a esta gloria viviente de la caviarada y de la controvertida fiscal Marita Barreto, tan recordada por el caso Orellana?
El espía incomprendido
Pero esto obviamente no es lo más importante. Las declaraciones del espía incomprendido conllevan una aceptación expresa de que él y su equipo, al mando de la Barreto, han venido investigando, al margen de la ley, a la entonces fiscal de la Nación Patricia Benavides.
Ha dicho Colchado que “Hemos investigado y hemos logrado el objetivo, pero en ese devenir viene también la otra información de que, a la vez, la Fiscal de la Nación había orquestado un aparato [una organización criminal de la que era cabeza] a través de un operador que fue detenido, el señor Jaime Villanueva” (...). Ah caramba.
Doble investigación del inspector ardilla.
¿En qué se basa?
Luego trata de escabullirse al subrayar que “no hemos investigado a Patricia Benavides”. ¿Total? Si de verdad no han investigado a Benavides, ¿en qué se basa el haberla ubicado como cabeza de organización criminal? ¿Bastaron los dichos del soplón Jaime Villanueva? ¿En qué se basa la “flagrancia y evidencia” que es el insumo principal que usa la Junta Nacional de Justicia (JNJ), como bien apunta Ricardo Pineda en sus redes?
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