Fiscal general de España es procesado por filtrar información
Álvaro García Ortiz fue sentado en el banquillo de los acusados por el delito de revelación de secretos.
Por no respetar la reserva y la confidencialidad de la información judicial, el fiscal general del Estado español –cargo que en el Perú sería equivalente al Fiscal de la Nación–, Álvaro García Ortiz, ha sido sentado en el banquillo de los acusados por el delito de revelación de secretos.
¿Cuándo se cumplirá este principio de responsabilidad en nuestro país? ¿Algún día procesarán a los filtradores seriales de información, como se ha visto en forma
grosera en el caso Lava jato? Hablen fiscalillos Vela y Pérez.
Bicentenario de Bolivia
En el marco del 200 aniversario de la independencia de Bolivia, el Congreso de la República rindió homenaje al país altiplánico representado por la exembajadora y ahora encargada de negocios de su país en el Perú, Eva Gloria Chuquimia. El tercer vicepresidente del Congreso, Waldemar Cerrón, fue el encargado de intervenir a nombre de la Mesa Directiva en el acto oficial realizado ayer en la Plaza Bolívar.
Proponen a “Melcochita” como patrimonio cultural
La nota pintoresca del parlamentario Waldemar Cerrón, de Perú Libre, fue la presentación de una iniciativa legislativa que busca declarar de interés nacional la postulación de Pablo Villanueva, más conocido como “Melcochita”, para ser reconocido como Patrimonio Cultural de la Nación, en la categoría de ‘Leyenda viva’, esto por “su destacada labor como sonero nacional, referente internacional y exponente del arte cómico popular”.
Clasistas y combativos
¿No era bastante con rendir homenaje a “Dayanita” y al “melcocha” junto a otros hace poco? ¿Qué pasa por la cabeza de los parlamentarios? ¿Se han achichado? El citado proyecto de ley cuenta con el respaldo de los legisladores Flavio Cruz, Isaac Mita, Américo Gonza, María Agüero y Kelly Portalatino, todos revolucionarios, clasistas y combativos, mariateguistas, adalides de las revoluciones proletarias en el Perú y el mundo. Ah, nos olvidamos: solo faltaron las firmas del “Puka” Guido Bellido, del “camarada Che” Guillermo Bermejo y del fronterizo Jaime Quito. Aplausos. Clap, clap, clap.
¿Cambios en Palacio?
En Palacio se vocean cambios. Todo indica que estos días habrá cambios de ministros, el primero en la mira sería nada menos que el premier Eduardo Arana, de quien se dice que habría trabajado en la ONG de IDL de Gustavo Gorriti y Susana Villarán. ¿Será cierto que Arana ha sido un alfil de Gorriti? Si así fuera, arderá Troya en Palacio. Dios nos coja confesados. ¿Qué nos dice el poderoso “Santi”, que ya anda también en correrías electorales?
Otros voceados
Otra que estaría en la cuerda floja sería la de Comercio Exterior (Úrsula Desilú) que “no ata ni desata en el sector, todos los involucrados privados están molestos con su gestión y ni hablar de las oficinas en el exterior que son un caos”, nos cuenta una fuente. Aunque hayan viajado junto con la Dama de Chalhuanca a Asia, en la lista de Schindler estarían el de Energía y Minas (Jorge Luis Montero Cornejo) por los chats de apoyo a informales mineros y el de Agricultura (Ángel Manuel Manero Campos).
Caviar terco
No sabíamos que la terquedad de abogado caviar era a prueba de balas. No obstante que la Sala Penal Permanente de la Suprema, que preside César San Martín, levantó el 31 de julio la suspensión que impedía a la fiscal Patricia Benavides retomar su cargo, y después la misma Sala declaró infundado otro recursos de apelación presentado por la fiscal de la Nación Delia Espinoza, contra su rival Benavides, el abogado de Odebrecht César Azabache insiste, terco, en desacatar los fallos de la Suprema.
Quiere una casación
Es su derecho al pataleo con tal de impedir que Benavides asuma un asiento en la Junta de Fiscales Supremos. Todo este debate sobre la validez o nulidad de los argumentos jurídicos que sostienen la reposición de Patricia Benavides como fiscal suprema “quedan supeditados a que la fiscalía solicite –y la Corte Suprema conceda, si lo hace– una revisión casatoria de la decisión del 31 de julio” de la Sala San Martín.
¿Algún juez les hará caso?
¿Algún abogado, que no sea ni Azabache ni su émulo Luciano López, o su pinky sensei y maestro Omar Cairo puede pensar en su sano juicio que este embrollo puede ir en casación a alguna sala de la misma Corte Suprema? ¿Algún juez supremo va a casar y pasarse por encima del requisito legal básico contra cualquier alto dignatario con derecho a fuero o aforado? ¿No es que debe pasar previamente por una acusación constitucional el Congreso?
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