Predictibilidad = más inversión y menos pobreza
Actos de corrupción, terrorismo, delincuencia, alzamientos sociales; creeríamos que Perú lo vivió casi todo en las últimas 5 décadas y pese a eso sigue mostrando algunos indicadores positivos que nos da una luz al final de túnel, que nos muestra un país mejor, con menos pobreza y más oportunidades para todos.
El propósito es crecer al menos 6% al año y para ello es importante promover la inversión privada. La llegada de capitales trae consigo la generación de más puestos de trabajo, descentralización e ingresos al fisco mediante al pago de impuestos. En pocas palabras, activa un círculo virtuoso que ayudará a reducir el número de personas que viven en una situación precaria.
Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la pobreza monetaria aumentó 1.6% en el 2022 respecto al 2021, afectando al 27.5% de la población, es decir, a 9 millones 180 mil personas de más de 33 millones.
En el objetivo de revertir esa cifra, la predictibilidad y estabilidad son fundamentales para incentivar la llegada de capitales. Un ejemplo se observó hace un mes cuando las unidades peruanas de la española Telefónica y la chilena Entel anunciaron un acuerdo que faculta a la firma internacional de inversión KKR a adquirir una participación mayoritaria en Pangeaco (empresa líder peruana que opera una red de fibra óptica de última generación).
Esa decisión la tomó luego de evaluar los indicadores del país, algo que también hacemos los empresarios cuando queremos invertir. A inicios de este siglo, por ejemplo, el gobierno promulgó la Ley 27360, gracias a la cual las agroexportaciones pasaron de US$ 394 millones en el 2000 a US$ 8 mil 527 millones en el 2022 y ni qué decir de los empleos creados a nivel nacional. Fue un boom que esperamos se repita en los próximos años, pues tras su derogatoria en el 2020, ese sector no avanza como antes.
El compromiso de la inversión adicional, con el liderazgo de KKR, es de US$ 200 millones y apunta a duplicar la red de fibra ultrarrápida en nuestro país y pasar de más de 2 millones de hogares a 5 millones 200 mil, hacia fines del 2026.
Según se informó, en Chile el número de viviendas con acceso a internet de alta velocidad pasó de 2 millones 400 mil a 3 millones 700 millones y en Colombia de 1 millón 200 mil a 2 millones 400 mil. Un gran avance en materia de conectividad que confiamos se concrete a nivel nacional.
Esa operación demuestra la confianza de los inversionistas extranjeros en nuestra nación y es lo mismo que queremos los empresarios peruanos. Nuestro deseo es apoyar la recuperación del país y en ese objetivo necesitamos un ambiente de predictibilidad y marcos jurídicos ad-hoc que promuevan sectores con mayor potencial. Avancemos en la agenda pendiente.
Por Julio Pérez Alván
(*) Presidente de la Asociación de Exportadores (ADEX).
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