Revelan testamento del papa Francisco: sumo pontífice deja carta final pidiendo su última voluntad
Su último escrito quedó registrado con su firma en el 2022.
El papa Francisco rechazó la fastuosidad que históricamente caracterizó los funerales papales y dejó por escrito su voluntad de recibir unas exequias marcadas por la sencillez.
El pontífice, fallecido este lunes a los 88 años, modificó en vida los protocolos tradicionales que guiaban los funerales de los papas, suprimiendo símbolos seculares como el triple ataúd, el báculo papal y la sepultura en la basílica de San Pedro.
Con el objetivo de humanizar su despedida, Francisco instruyó en el documento Ordo Exsequiarum Romani Ponteficis, que el cuerpo sea colocado directamente en un ataúd único, sin catafalco y sin ornamentos adicionales.
“Deseo una ceremonia sobria y centrada en la oración, no en el espectáculo”, expresó en sus últimas voluntades.
El cardenal Kevin Farrell, actual camarlengo, encabezará el proceso de exequias, tal como lo establece la liturgia durante el período de “sede vacante”. La verificación oficial de la muerte, la retirada del Anillo del Pescador y la destrucción del sello papal, seguirán los pasos protocolares, aunque ahora bajo un nuevo formato simplificado.
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En lugar del tradicional triple ataúd de ciprés, plomo y roble, el vicediós eligió una sola urna de madera. También prescindió del báculo papal, que normalmente acompañaba el cuerpo durante el velatorio público en la basílica de San Pedro.
Además, prefirió ser sepultado en la Basílica de Santa María la Mayor, fuera del Vaticano, sitio al que acudió en múltiples ocasiones antes y después de cada viaje apostólico.
Durante la exposición pública del cuerpo, los fieles podrán rendir homenaje al pontífice sin los elementos que habitualmente simbolizaban el poder papal. En lugar de un catafalco elevado, Francisco pidió que su ataúd, sin ornamentos, se coloque directamente al nivel del suelo.
El pergamino conmemorativo que relata sus obras, junto con monedas acuñadas durante su pontificado, será depositado en el féretro como símbolo histórico. La sepultura, tal como lo dispuso, será en tierra y con una sencilla inscripción: Franciscus.
El funeral se celebrará en la plaza de San Pedro, en una fecha aún por determinar por el Colegio Cardenalicio. Luego se iniciarán los novendiales, las misas diarias por el descanso del alma del pontífice.
Con estas decisiones, el papa Francisco transformó no solo la liturgia funeraria, sino también el significado de la muerte papal en la era contemporánea. Su último gesto de humildad reafirma el mensaje que guio su vida: la Iglesia debe caminar con sencillez, cerca de los pobres y libre de vanidad.
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