Domingo Pérez no quiso participar en audiencia sobre pedido de cárcel domiciliaria para Yoshiyama
El juez Santos Benites anunció que enviará un informe de la actitud de Pérez a la Oficina de Control Interno del Ministerio Público. Audiencia fue reprogramada para el próximo miércoles 22 de abril.
El fiscal José Domingo Pérez se negó a participar este viernes de la audiencia, a cargo del juez Santos Benites Burgos, sobre el pedido de variación de prisión preventiva por cárcel domiciliaria para Jaime Yoshiyama, quien, de acuerdo a su defensa legal, correría riesgo de infectarse de coronavirus (COVID-19).
Una vez instalados Benites Burgos y el abogado de Yoshiyama, Humberto Abanto, el miembro del Equipo Especial Lava Jato se levantó -dejando sus documentos y laptop- y se dirigió a la puerta de la sala, negándose a participar de la sesión.
Ante ello, el juez Santos Benites lo invitó a sentarse y a acreditarse como representante de la Fiscalía, pero Pérez se quedó parado y dijo que justificaría su actitud, al tiempo que sostuvo que no podían obligarlo porque pertenecía a un órgano constitucionalmente autónomo.
Tras la resistencia de Domingo Pérez, el titular del Segundo Juzgado de Investigación Preparatoria Especializado en Crimen anunció que enviaría un informe de lo ocurrido a la Oficina de Control Interno del Ministerio Público. «Vamos a tomar las medidas del caso inmediatamente», dijo.
Finalmente, al no haber un representante del MP, el magistrado decidió reprogramar la audiencia para el próximo miércoles 22 de abril.
Recordemos que el fiscal José Pérez había pedido la recusación de Benites y la anulación de la audiencia, al sostener que el juez tendría una alusión en uno de los documentos incautados a Vicente Silva Checa, comprendido en la misma investigación que Yoshiyama. No obstante, ambos requerimientos fueron rechazados por Santos Benites.
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Jaime Yoshiyana Tanaka, exsecretario general de Fuerza Popular, es indagado por el supuesto delito de lavado de activos por presuntamente haber recibido, junto a Augusto Bedoya Cámere, un millón de dólares de la corrupta constructora Odebrecht para la campaña presidencial de Keiko Fujimori del 2011.