Pedro Castillo se burla y destruye Gamarra
El ministro Roberto Sánchez habla de golpismo, pero es él quien está golpeando a la industria textil y pymes, dejando sin empleo a más de un millón de personas.
Por Fidel Quevedo
El sector textil de confecciones está conformado aproximadamente por cien mil empresas, de las cuales el 99 % son micro y pequeños negocios, los mismos que tienen impacto en un millón de trabajos directos e indirectos en todo el Perú.
En el rubro, especialmente golpeado por el confinamiento de la pandemia, se estima que al menos el 50 % se encuentra en estado de quiebra, es decir, más de medio millón de peruanos perdieron sus empleos tras la crisis sanitaria.
Según la presidenta de la Asociación Empresarial Gamarra Perú, Susana Saldaña, el avance del proceso de recuperación después de las cuarentenas apenas ha llegado al 50% en el número de puestos de trabajo, pero "nuestras ventas aún no superan el 40% comparado con las cifras prepandemia", informa.
Saldaña asegura que dichas unidades empresariales nunca tuvieron las espaldas financieras para soportar una crisis sin precedentes como fue el confinamiento por meses, y que el Ejecutivo no ha hecho absolutamente nada por ayudarlos en el proceso de recuperación.
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"Nosotros alertamos de esta situación desde el primer día, y explicamos que, sin medidas de rescate financiero, sin acciones que nos ayuden a recuperarnos, esto va a ser imposible y eso es lo que está pasando (…) el gobierno central, el autodenominado ‘gobierno del pueblo’ del señor Castillo, no nos ayuda en nada; tampoco lo hizo Martín Vizcarra ni mucho menos Francisco Sagasti", denuncia Saldaña.
Saldaña precisa que todo el avance de recuperación del sector es un esfuerzo exclusivo de las pequeñas y micro empresas, y que en nada intervino el Ejecutivo para alcanzar el referido 40 % de los niveles prepandemia.
"Se promovieron estos fondos, como Reactiva (y otros similares), todos absolutamente inútiles en la medida en que no llegan a quien deben llegar. ¿Por qué? Porque cuando se toma en cuenta este tipo de ayuda, se hace a la medida de otras empresas, y no se considera la realidad", explica.
Al mismo tiempo de alertar que el sector está al borde de la quiebra, asegura que se requiere de un rescate financiero en ese ámbito, con créditos a tasas de interés por debajo del 5 % al año. "Lo anunciamos desde el primer momento, que si los créditos no vienen a tasas de interés por debajo del 5% al año no van a servir de nada", sostuvo.
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