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Gobierno de Ollanta Humala impidió la captura del terrorista “José”

“Me sacó del cargo en momentos en que mis fuerzas iban a tomar por asalto el cuartel del jefe del narcoterrorismo en el Vraem.

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Fecha Publicación: 02/02/2019 - 01:00
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El Estado ha fracasado en la guerra contra el narcoterrorismo del grupo Sendero Rojo que lidera Víctor Quispe Palomino (a) “camarada José” en el valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem) y por extensión ha fracasado en la lucha contra el narcotráfico que opera en esta región con el apoyo de las huestes terroristas, y lo que es más grave, las autoridades responsables políticas de estas tareas hacen todo lo posible para no llevar la confrontación hasta las últimas consecuencias.

El autor de esta drástica declaración es el general EP (r) Leonel Cabrera Pino, ex presidente del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas - CCFFAA, entre el 2013 y 2014 durante el gobierno de Ollanta Humala.

Cabe destacar que Cabrera Pino lideró en el Vraem las operaciones contra el narcoterrorismo supérstite, primero en su calidad de jefe militar del Vraem en 2010, cargo que tuvo que dejar para asumir la jefatura de la III Región Militar Sur, en los días en que el Perú litigaba con Chile en La Haya por una frontera marítima y, finalmente, como jefe del Comando de las FF.AA.

Cabrera, según los analistas en temas de seguridad, es el militar que estuvo muy cerca de erradicar el terrorismo del Vraem, al que no le dio tregua porque lo acosó en sus escondites más recónditos. Por eso es que incluso en documentos incautados a Quispe Palomino lo calificaban de “Sun Tzu”, en alusión al antiguo estratega militar chino, autor de “El arte de la guerra”, que es el libro de cabecera de los militares estudiosos.

Aquí sus declaraciones exclusivas en la entrevista que nos concedió en su domicilio.

 

RETROCESOS

–¿Considera usted que la lucha contra el terrorismo ha experimentado más retrocesos que avances?

El enorme retroceso en la guerra contra el narcosenderismo en el Vraem es incomprensible y suicida para el país. El terrorista Víctor Quispe Palomino, cabecilla de la fracción “Sendero Rojo”, se desplaza libremente en los ámbitos geográficos de las provincias de Huanta, Ayacucho y Tayacaja (Huancavelica), lugares donde en este último año han realizado impunemente 135 desplazamientos, 16 incursiones y cinco acciones de agitación y propaganda, conocidas como ‘agit-prop’.

Los distritos con mayor desplazamientos en incursiones de “José” son: Huachocolpa, Pucacolpa, Canayre y Sivia-Tayacaja.

–¿Es cierto, como refieren algunos pobladores, que hay una promoción de nuevos jefes terroristas improvisados, en reemplazo de los que fueron abatidos en 2013, como “Gabriel” y “Alipio”?

Es cierto, el terrorismo se recicla, entre los nuevos jefes está “Antonio”, el cuarto mando militar que suele desplazarse por los centros poblados de los distritos de Canayre, Llochegua, Sivia (provincia de Huanta) y Roble (Tayacaja).

–¿Por qué dice que hemos fracasado en la lucha contra el narcoterrorismo que tiene su radio de operaciones en el Vraem?

Han transcurrido 18 años desde que el Estado delegó en las Fuerzas Armadas la tarea de eliminar el bolsón de remanentes terroristas del Partido Comunista - Sendero Luminoso y a la fecha los cabecillas liderados por el “camarada José” se mantienen irreductibles en sus posiciones y, por su fuera poco, la producción de drogas de la zona ha crecido, al extremo de que este grupo terrorista se convertido en  un cártel de la droga.

CUANDO SE JODIÓ…

–¿En qué momento –parafraseando una frase de Mario Vargas Llosa  en su novela “Conversación en La Catedral”– se jodió la lucha contra el narcoterrorismo?

Ese momento fue cuando el expresidente Ollanta Humala me sacó de la zona de operaciones militares del Vraem, en circunstancias en que me aprestaba a lanzar el asalto final al cuartel de “José” y me hizo renunciar del cargo de presidente del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas - CCFFAA a menos del año de estar en ese puesto. Todo esto a pesar de que tenía un techo de tres años de servicios, lapso en el que podía haber cumplido mi promesa de eliminar todo vestigio de narcoterrorismo en la zona.

–¿Qué otras repercusiones tuvo la decisión del expresidente Humala, además de bloquear la captura de “José”?

Fui reemplazado en el CCFFAA por el vicealmirante Wladimiro Giovannini y Freyre y lo que siguió después fue un desmantelamiento de los planes militares para capturar a “José”, como por ejemplo la desactivación de unos 30 helicópteros que controlaban el espacio aéreo del Vraem y se dedicaban a descubrir los cultivos ilegales de hoja de coca en todo el territorio de la región controlada por los Quispe Palomino, lo cual sin duda favoreció al narcoterrorismo.

–¿Esos 30 helicópteros que fueron retirados de la lucha antidrogas por el gobierno de dónde salieron?

En mi calidad de presidente de la CCFFAA los gestioné y obtuve del gobierno de los EE.UU. en calidad de cooperación internacional en la lucha contra el narcotráfico.  Al ya no ser utilizados, el donante procedió a retirarlos para destinarlos en sus actividades en el Medio Oriente.

PLANES DESACTIVADOS

–¿Qué otros planes fueron desactivados con su remoción de jefe de las operaciones militares para capturar a “José”?

También obtuvimos de la cooperación estadounidense, pertrechos militares para la organización de hasta 20 bases móviles para más de un centenar de efectivos militares, que jamás fueron utilizadas, por lo cual fueron igualmente recuperadas por el donante.

–En el Vraem, gracias a la acción militar, se inhabilitaron las pistas de aterrizaje que utilizaban los narcoterroristas, pero el narcotráfico sigue activo. ¿Qué está pasando?

Producto de la inhabilitación de las pistas de aterrizaje clandestino por acción de las fuerzas operativas, los narcoterroristas estarían ahora direccionando estas actividades ilícitas hacia áreas de las regiones Pasco, Ucayali y Huánuco, que están fuera del ámbito del Vraem y donde existe escaso control aéreo y terrestre de las fuerzas armadas y policiales.

–Pese a los retrocesos derivados de la oportunidad perdida de capturar a “José”, ¿sus camaradas de armas en la zona estarían manteniendo algunos logros?

Nosotros estructuramos planes militares sin duda determinantes, por ejemplo, para que el año pasado, previo a las elecciones municipales y regionales, no haya pasado absolutamente nada. Evidentemente, en el Vraem hay una nueva situación, contamos ahora con una moderna flota de helicópteros y somos el segundo país después de Colombia con capacidad de mover los medios de combate  de manera mejor reestructurada, y es que en el Vraem la movilidad es vital.

ENTRE 1999 Y 2017 LOS ATAQUES PRODUCTO DE LA ALIANZA ENTRE EL TERRORISMO Y EL NARCOTRÁFICO CONTRA LA POBLACIÓN HAN IDO EN AUMENTO. SE CONTABILIZA HASTA LA FECHA UN TOTAL DE 276 ATENTADOS Y 446 ASESINATOS TANTO DE MIEMBROS DE LAS FUERZAS ARMADAS Y POLICIALES COMO DE CIVILES.

 

“PARA HACER TORTILLA HAY QUE ROMPER HUEVOS Y LOS MILITARES DEBEMOS ASUMIR ESTA RESPONSABILIDAD”, AFIRMA

“Hay que terminar ahora con el foco terrorista del Vraem”

El ex jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, general Leonel Cabrera Pino, considera que se dan las condiciones para acabar militarmente con el narcoterrorismo y el extendido tráfico ilícito de drogas que impera en el Vraem.

–¿Cree que militarmente están dadas las condiciones para eliminar el narcoterrorismo del Vraem, teniendo en cuenta que usted dejó planes para esta acción?

Los delincuentes terroristas están focalizados en el Vraem y corresponde terminar ahora con este foco terrorista y cortar de una vez con la gran ineficiencia de la gente que maneja las operaciones. Hay una serie de factores que tienen que ser analizados. Nosotros tenemos un plan y no vamos a vivir eternamente con ese flagelo. Nuestras Fuerzas Armadas tienen en este momento un gran potencial.

–¿Qué falta para tomar esta decisión?

Lógicamente, para hacer tortilla hay que romper huevos, sucede que nadie quiere arriesgar, pero esa es la parte de nuestro trabajo y somos los militares los que tenemos que asumir esa responsabilidad para terminar con este foco y pacificar definitivamente el país.

–¿Aún es posible utilizar ahora el plan que usted proyectó aplicar para eliminar el narcoterrorismo en el Vraem?

Nosotros dejamos para que sean instaladas nueve bases militares altamente móviles, itinerantes, para cortarles a los narcoterroristas todas las vías de acceso, las que hasta ahora no han sido desplegadas. Si no puedes pescar el pez, córtale el agua y tendrás al pez en tus manos. Algún día van a salir de sus escondrijos y al hacerlo los estaremos esperando. Hay que tomar decisiones y arriesgar.

–Describa usted estas bases móviles.

Estas bases son altamente móviles, tenían presupuesto asignado, en las que los combatientes van a contar con ciertas comodidades, posibles de instalar y desinstalar en cualquier momento y en menos de un día.

–En términos de seguridad, ¿en la región del Vraem se observa algún descenso de los riesgos de seguridad a que están sometidas las poblaciones que lo habitan?

Las cifras difundidas por los observatorios oficiales son elocuentes, en el lapso de 1999 al 2017 los ataques producto de la alianza entre el terrorismo y el narcotráfico contra la población han ido en aumento, contabilizándose hasta la fecha un total de 276 atentados y 446 asesinatos tanto de miembros de las Fuerzas Armadas y policiales, como de civiles.

CABRERA: VRAEM PRODUCE 300 TM DE DROGA DEL TOTAL NACIONAL DE 400

Lucha antidrogas ha fracasado por falta de interés político

Leonel Cabrera Pino advirtió que si el gobierno actual quiere realmente aplicar una correcta política antidrogas con resultados medibles, debe hacerse una autocrítica y reconocer que la estrategia antidrogas aplicada hasta la fecha  ha fracasado, principalmente en el Vraem, donde la producción actual de drogas es de 300 toneladas anuales, del total de 400 que se producen en el ámbito nacional.

–¿No solamente la estrategia militar antiterrorista en el Vraem ha fracasado, sino también la estrategia nacional antidrogas?

Bueno, yo me remito a los resultados y a los números. El almirante (r) Alfredo Palacios Dongo ha entregado cifras no refutadas por el gobierno, en el sentido de que las estrategia antidrogas implementadas en los años 2007, 2012, 2013, 2017 y 2018 son más de lo mismo, no han revertido la producción de drogas en el Vraem, cuyas cifras en lugar de disminuir aumentan cada año. El Vraem produce a la fecha 300 toneladas de clorhidrato de cocaína anualmente, del total de 400 que se producen a nivel nacional.

–Hablando más claramente, ¿si se liquida el narcoterrorismo en el Vraem ya no habría las 300 toneladas de droga anuales que aporta el cártel que opera aquí?

Correcto, hablando claramente no habría pues un interés político contundente en acabar con el narcotráfico en el Vraem. El narcotráfico moviliza anualmente alrededor de US$ 8,500 millones resultantes de la producción de 400 toneladas anuales de cocaína que sale del Perú por diferentes rutas con destino a Europa, EE.UU. e incluso a Asia. Esta cifra descomunal equivale a cerca del 20 %  de las exportaciones, las que en el 2017 sumaron US$ 44,058 millones.

–¿Cuál sería el cuestionamiento más serio que usted haría a Devida?

Bueno, no soy yo el único que  califica de un fracaso la labor de Devida. Hay otros analistas, entre ellos Miguel Lagos, que expresan sin ambages que “Devida, en las estrategias que le ha dotado el gobierno, no considera la erradicación de la hoja de coca ni menos la erradicación de los espacios cocaleros, al menos por el momento”.

–Por lo tanto, ¿no hay erradicación de la hoja de coca como sería lo recomendable para dejarle sin insumos a los laboratorios de la droga que operan en el Vraem?

La Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas, conocida como Devida, ha carecido de una estrategia correcta que signifique desarrollar simultáneamente  acciones de erradicación de los cultivos de hojas de coca y de acciones de desarrollo social. Volviendo al estudio del almirante Palacios, en el Vraem en este momento existen más de 20,000 hectáreas con sembríos de hoja de coca con un rendimiento de plantaciones que producen 73,000 toneladas de hoja de coca, las que a su vez producen las 300 toneladas de droga anuales.

–¿Qué hay de las inversiones de millones de dólares destinados a combatir el narcotráfico en el Vraem?

Si nos atenemos a los resultados habrían sido inútiles, pero lo más importante sería conocer si realmente fueron invertidos con transparencia. Una investigación del excongreista Róger Nájar Kokally, ex presidente de la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afroperuanos, ha revelado que Devida recibió  sucesivamente US$ 748 millones y US$ 1,198 millones entre el 2009 y 2016, que estaban destinados a promover cultivos alternativos en las provincias de Padre Abad-Aguaytía, Pachitea, San Alejandro, Tamaya, Atalaya-Obenteni, Callería, Abujao, Alto Putuya y Utiquinea, y obviamente en los valles de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro.

 

–¿Conoce si ha habido uso correcto o incorrecto de la ayuda financiera para mejorar las acciones de interdicción contra el narcotráfico y su aliado el terrorismo?

Solo cabría preguntar, ¿dónde han ido a parar los más de S/ 2,100 millones que el fisco ha destinado para la lucha antidrogas entre enero de 2012 y mediados de 2017, es decir en el gobierno de Humala  e inicios del gobierno de Pedro Pablo Kuczynski? Resulta que, según la web Ojo Público, los citados gobiernos destinaron los recursos en primer lugar a la Dirección de Economía de la Policía Nacional, ente que asegura haberlos invertido en erradicación y reducción de cultivo ilícitos; en segundo lugar a Devida, que afirma haber ejecutado proyectos de seguridad (unidades especializadas en el control de la oferta de la droga), salud (atención de adictos) y prevención; y, en tercer lugar, a la Dirandro, que lidera la parte operativa de la lucha antidrogas, convertida en la cenicienta de la distribución de este presupuesto.

LEONIDAS CANCHANYA JOAQUÍN, ENVIADO ESPECIAL

 

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