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¿Qué fue de Jorge Olaechea? Así vive hoy futbolista que defendió la rojiblanca en España 82

Desde niño trabajó para ayudar a su familia y hace 24 años radica en Estados Unidos. ¿A qué se dedica?

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¿Qué fue de Jorge Olaechea? Así vive hoy futbolista que defendió la rojiblanca en España 82.
Fecha Publicación: 30/09/2025 - 08:46
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Desde Denver, Colorado, Estados Unidos, vía WhatsApp, contactamos a Jorge Olaechea Andrés Quijandría, exjugador de Alianza Lima, Independiente de Medellín, Deportivo Cali, Sporting Cristal, Bolívar de La Paz y Deportivo Municipal.

El popular ‘Mango’ jugó el Mundial España 82 y hoy radica en la tierra del Tío Sam. Hace poco el mundialista viajó a Paterson, Nueva Jersey, para reforzar al equipo Alianza Lima, donde se reencontró con excompañeros blanquiazules como Freddy Ravello, Carlos Guido, Humberto Rey Muñoz y de selección como Rubén ‘Panadero’ Díaz y Hugo Gastulo. Él ha prometido regresar para disputar la liguilla final.

Don Jorge, ¿qué tal?

Hola, acá trabajando, soy encargado de mantenimiento en una cadena de hoteles a nivel mundial, cuya corporación se llama Stonebridge (Hilton de Denver), donde mis hijas Vanessa y Sheyla son las managers. Mi otra hija, Kelly vine en Ica y es profesora de inglés en el ICPNA. Pero empecé como todos los migrantes trabajando en construcción, remodelación y pintura, aunque al principio traté de ser entrenador de alguna escuela o universidad, pero se me complicó porque me pedían el inglés y que tenga papeles. De ahí empecé a arbitrar partidos y me dirigía cinco o seis los sábados y domingos.

¿Desde hace cuánto tiempo vive en Estados Unidos?

Ya tengo 24 años por acá. Gracias a Dios ya toda mi familia y yo tenemos la ciudadanía y no tenemos problemas con este nuevo presidente. Acá solo hay tiempo para trabajar y dedicarle el resto a la familia. Tengo 10 nietos y eso me pone feliz.

¿Qué hacía antes de dedicarse al fútbol?

Trabajé desde los 12 años para apoyar a mis padres Andrés, que era vigilante de la Universidad San Luis Gonzaga de Ica y Virginia, que vendí comida en la esquina de la casa. Empecé ayudando a un amigo de mi papá que tenía una tienda de repuestos, allí me encargaba de la limpieza de la oficina. Es que éramos 6 hermanos (Ricardina, Aurelio, Freddy, Andrés y Eddy) y éramos pobres y había que ayudar a mis padres.

¿Solo eso?

No. Luego, cuando me llevaron a jugar al Mariátegui me ofrecieron un trabajo de almacenero en la Cooperativa contando los sacos de frijoles, pallares, etc. Pero cuando llegué a mi primer día de trabajo, el almacenero aún no había renunciado y no lo podían botar. Entonces, me dijeron toma tu lampa, tu lima y anda al campo. Acepté, pero empecé con viada, pero como tenía que estar casi doblado, a los 10 minutos quise enderezar mi cuerpo y no pude, la cintura me dolía, tenía las manos entumidas y así como pude tiré la lampa. Le dije al capataz: ‘esto no es para mí. Si quieres que juegue para tu equipo, lo siento, pero yo no voy a trabajar aquí en el campo. A Dios gracias los compañeros hacían mi trabajo, yo descansaba y solo me dedicaba a jugar los fines de semana.

¿Cómo se inicia en el fútbol?

Yo empiezo en el club Juventud Santa Rosa de San Joaquín, Ica. En Segunda División, luego formé parte de la selección iqueña que jugó el Campeonato Nacional. Recuerdo que el DT de Lima era el profesor Zacarías y en ese equipo jugaban Roberto Rojas, ‘Chalaca’ Gonzales y Eduardo Rey Muñoz.

Luego, ¿qué vino?

Posteriormente pasé al José Carlos Mariátegui de Ica que fue a Lima a jugar la finalísima de la Copa Perú. Eso fue en 1977. Ese año campeonó Torino de Talara y como premio representó a Perú en los Juegos Bolivarianos en La Paz, Bolivia. Y el entrenador del ‘Taladro’, Carlos Bustinza, pidió que Julio Rebatta y yo vayamos como refuerzos.

¿Quién lo llevó a Alianza Lima?

El ‘Cholo’ Rafael Castillo acostumbraba a ir al Estadio Nacional para ver los tripletes de la Copa Perú y elegía a los mejores jugadores para llevarlos a Alianza. Él fue el que me recomendó con el profesor Juan Eduardo Hohberg, quien era el entrenador y después ya arreglé con el directivo Walter Lavalleja, a fines del 77.

¿Y cómo le fue en su primera temporada con los íntimos?

Cuando llegué a Alianza los principales jugadores del equipo estaban preparándose con la selección para jugar el Mundial Argentina 78 y los que quedamos éramos prácticamente el equipo B.

¿Tiene alguna anécdota en Matute?

Cuando los titulares volvieron del mundial, yo jugaban como volante y usaba el número 8. Pero el profesor Hohberg me dijo: ‘Jorge, disculpa, tienes que cambiarte el número de camiseta. No puedes jugar ni con la 6 (Velásquez), ni con la 8 (Cueto) ni con la 10 (Cubillas)’. Y desde ahí empecé a jugar con la casaquilla número 16. Yo le dije: ‘Profe, sabe qué, yo solo quiero jugar. Para mí lo importante era ser titular porque un año antes ellos, Duarte, Salguero, Caíco, Cucurucho Rojas, Sotil, Freddy Ravello, eran mis ídolos porque yo soy aliancista de corazón. Imagímate, de un año a otro estaba jugando en la Copa Perú y al siguiente estaba al lado de los mundialistas.

¿Cómo nace el apelativo de ‘Mango’?

Es que cuando llegué a Alianza, el hoy finado Javier Castillo me decía: ‘sobrino, tú eres de Ica y allí hay buenos mangos. Dile a tus padres que te manden un poco. Y yo obediente les hice el pedido y me mandaron un cajón. Entonces, el día que llegaron empecé a repartirle a todos en el equipo y desde ese día me quedé con esa ‘chapa’.

Luego vino la internacionalización

Sí, jugué en Alianza hasta 1983 y luego me fui al Independiente Medellín (84-87), Deportivo Cali (87-89) y luego regresé a jugar por Sporting Cristal (89-90). El 91 y 92 me contrató el Bolívar de La Paz, pero como una de mis hijas no se adaptó a la altura, preferí regresar a Perú y ahí firmé por Municipal (95), club donde me retiro y por cierto hasta ahora me quedó debiendo mucha plata. Ja, ja, ja.

En Colombia se enfrentó a varios peruanos que también fueron a jugar por allá.

Sí y lo que más recuerdo son los clásicos que disputábamos Independiente de Medellín ante Atlético Nacional, donde jugaban César Cueto y Guillermo La Rosa.

¿Y el ‘Poeta de la Zurda’ se llevó sus cariñitos en estos choques?

Claro, pero todo deportivamente, sin mala fe. Es que cada uno tenía que defender sus frijoles, pero después del partido siempre nos íbamos a cenar a la casa de alguno de nosotros con nuestras familias.

¿Cuántos títulos alcanzó?

Tres. Uno con Alianza (78) y dos con Bolívar (91 y 92), donde también jugó Jorge ‘Koki’ Hirano.

Para usted, ¿quién fue su mejor entrenador?

Te podría mencionar a Juan Eduardo Hohberg, Julio Avelino Comeseña y el brasileño Tim.

¿Quién es su mejor amigo en el fútbol?

Uff, tengo varios. Ravello, Illescas, Cubillas, Cueto, Uribe.

Como defensa, ¿cuál fue el delantero más peligroso que enfrentó?

Los italianos Paolo Rossi y Bruno Conti así como los polacos Lato y Boniek en el mundial España 82.

A propósito, usted ha desfilado por varios puestos en el fútbol.

Así es. Empecé como volante, luego jugué como zaguero y en el mundial tras la lesión de Roberto Rojas en la gira por África y Europa, el profesor Tim me pidió si podía jugar como lateral izquierdo y tras algunos amistosos, al final él me dijo que ese iba a ser mi puesto en el Mundial.

¿Qué opina de que Renato Tapia no quiso jugar por la selección en la Copa América USA 2024 si la federación no le pagaba un seguro ante cualquier eventualidad de lesión?

En cada partido los futbolistas corremos ese riesgo, pero es nuestra profesión. No sé si él también tiene ese seguro en su club.

¿Cree que estuvo bien la medida que tomó Tapia?

Para mí, no.

Primero está el país, ¿no?

Así es, yo me equivoqué una vez y todavía me duele. En 1979 fui suspendido seis meses sin jugar por Cristal y siendo capitán suspendido 5 años en la blanquirroja, medida tomada por la federación por negarme a viajar a Montevideo para jugar ante Uruguay, pero eso fue diferente porque mi protesta no fue por el maltrato que sufríamos los seleccionados por parte de la directiva. Además, esa selección creo que fue la peor de la historia del fútbol peruano y la dirigió el brasileño José Macia ‘Pepe’, quien fue compañero de Pelé en el Santos FC y fue bicampeón mundial con el Scratch (Suecia 58 y Chile 62).

Y como volante, ¿con qué ‘bravos’ ha tenido problemas?

Aparte de Maradona, siempre se me hizo difícil marcar a Cueto, Leguía y Uribe.

¿Qué pasó en España 82?

Luego de la exitosa y brillante eliminatoria que hicimos, realizamos una extraordinaria gira por Europa y África. Hasta ahora recuerdo el baile que le metimos a la selección de Francia con Platini y todo. Pero luego nos llevaron a Alemania antes de ir a jugar el mundial y nos ‘mataron’ físicamente porque hicimos una especie de pretemporada muy exigente. Además, hubo variantes en el equipo y creo que eso debilitó el poderío que habíamos demostrado antes del mundial.

Si le pregunto: ¿Cuál sería el mejor once con el que haya jugado?

José ‘Caíco’ Gonzales Ganoza

Jaime Duarte, Héctor Chumpitaz, Luis Perea (Colombia), Toribio Díaz

Teófilo Cubillas, José Velásquez, César Cueto, Carlos Valderrama (Colombia)

Hugo Sotil y Juan Carlos Oblitas.

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