Juan Carlos Liendo: «Hay peligro de Tercera Guerra Mundial»
La geopolítica global tiene frentes abiertos, micro conflictos alrededor del mundo, desajustes del sistema internacional, potencias hegemónicas enfrentadas.
Juan Carlos Liendo ha asesorado directamente en asuntos de seguridad nacional, crimen organizado, violencia social, terrorismo, narcotráfico, en operaciones de asistencia humanitaria y actividades de cooperación internacional a la Comandancia General del Ejército Peruano, Comando Conjunto de las FF.AA., Ministerio de Defensa de Perú y al Estado Mayor del Comando Sur de los Estados Unidos (US SOUTHCOM).
¿Este ataque terrorista de Hamás a Israel puede tomarse como un ataque contra occidente?
Sí, en el contexto estratégico de la geopolítica global, es una muestra del conflicto entre occidente y el mundo oriental, y, en mayor detalle, es un ejemplo de la lucha entre sociedades autoritarias y religiosas versus sociedades liberales y ateas.
Es inaudito el apoyo de la izquierda progresista que tenemos en el país a este grupo terrorista. Muchos enarbolan la bandera LGTB, pero, si vivieran en la Franja de Gaza, serían decapitados.
Definitivamente, el neoterrorismo tiene una combinación muy singular entre fundamentalismo marxista y fundamentalismo religioso. Es una nueva forma de terrorismo, muy característica de la izquierda, a la que se suma la izquierda cultural, con un fuerte componente religioso fundamentalista.
Pero, ¿cómo alguien que dice ser progresista puede apoyar a un terrorista, que es lo más fundamentalista que existe?
Es que hay un factor común entre ellos. Para todo marxista, ya sea clásico o cultural, el principio de la conciencia es odio, rencor, resentimiento y sed de venganza.
No han abandonado el concepto de que ‘la violencia es la partera de la historia’.
Exacto, tal cual.
¿Y cómo Hamás ha podido atacar Israel, a pesar de Mossad, que es uno de los servicios de inteligencia más importantes del mundo?
Es que la magnitud de estos ataques terroristas, que se han dado de forma simultánea, supera al mismo Hamás y al enfoque de la inteligencia del país más desarrollado en estos asuntos, como es Israel, porque resulta impensable el nivel de barbarie y violencia que se ha empleado. La única manera de reprimirlo es con el exterminio de la fuerza atacante; entonces, lo que ha sorprendido a Israel es que Hamás haya usado una violencia que lo está llevando al suicidio existencial como organización. Israel está contraatacando y no va a parar hasta el exterminio de Hamás.
Y lo que hace Hamás es esconderse entre civiles.
Lo de Hamás ha sido un ataque brutal y barbárico contra población civil e indefensa; no ha sido contra infraestructura, ni fuerza militar de ningún tipo.
La respuesta de Israel ha sido bombardear la Franja de Gaza.
Lo que estamos viendo es una operación de venganza. El contraataque de Israel está cargado de una sed de venganza entendible por la magnitud de la barbarie. El miedo y terror que ha generado Hamás está causando una respuesta más dura de la recibida.
Y la única exhortación que puede hacer el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, es que los civiles palestinos se alejen de la Franja de Gaza.
Y con eso se está obligando a un desplazamiento masivo por la única vía de salida, que es el paso de Rafah, por Egipto. La población está atrapada, sin comida, agua, electricidad ni combustible. El nivel y dolor y violencia es elevadísimo y va a durar mucho tiempo.
Desde Estados Unidos llegan informaciones de que Irán habría patrocinado a Hamás.
Hay nexos entre Hamás e Irán, a través de Hezbollah. El nivel de organización, preparación, inteligencia, logística y financiamiento sobrepasa las posibilidades de Hamás e involucra directamente a Irán.
Joe Biden ha dicho que apoya a Israel, pero él no tiene liderazgo.
Estados Unidos sigue siendo la mayor potencia militar del planeta, pero tiene un liderazgo progresista débil. Cuando los políticos fallan, entran las armas, y EE.UU. está demostrando un poco ello. Las implicancias de Israel para el mundo occidental pueden llevar a Estados Unidos a una guerra.
Usted deslizó que no es desquiciado pensar en una Tercera Guerra Mundial.
Están todas las condiciones dadas: los frentes abiertos, micro conflictos alrededor del mundo, desajustes del sistema internacional, potencias hegemónicas enfrentadas y en proceso de captar nuevas alianzas y de posicionarse geográficamente. Y China, que es una gran potencia emergente, está en balcón viendo cómo se desarrollan los acontecimientos. Todos los ingredientes para una guerra están planteados.
Y nadie hace caso a los pronunciamientos de la ONU.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ya no constituye un foro serio para poder discutir, plantear alternativas de solución o tomar acciones de carácter internacionales. Las Naciones Unidas están en proceso de disolución porque se ha convertido en un organismo internacional irrelevante.
¿Usted cree que Hamás hubiera atacado Israel si es que Donald Trump fuera el presidente de Estados Unidos?
Definitivamente no. Trump encarna el ala dura del balance del poder, desde una visión realista y antiprogresista del ejercicio de la fuerza. También Trump tiene un fuerte componente de inspiración religiosa protestante y es aliado de Israel.
"No hubiera ocurrido en mi mandato"
Por Aaron Salomón
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